FmBolivia
Uniendo a más bolivianos en todo el planeta.

olivia allana salida al Atlántico y potencia complejo portuario privado en Hidrovía Paraguay-Paraná

Bolivia pasó el martes de las palabras a los hechos y desde el Estado apuntaló por primera vez en su historia de 193 años, un complejo portuario privado asentado en la cabecera de la Hidrovía Paraguay Paraná, que representa su salida soberana al Océano Atlántico.

Se trata de la asignación del carácter de puertos internacionales con aval de Estado, a los privados de Jennefer, Aguirre y Gravetal, en el extremo oriente de Bolivia, además de la instalación, aquí mismo, a 600 km de la ciudad de Santa Cruz, a su vez a 900 km de La Paz, de servicios de aduana, migarcióny fitosanitarios.

Un mes después de que la Corte Internacional de Justicia, de La Haya, eximiera a Chile de negociar con Bolivia una salida propia al mar Pacífico, tras 5 años de juicio, el presidente Evo Morales entregó los certificados de recategorización estatal a los puertos, que desde el influjo privado operan carga internacional hace 20 años, en concreto soja, girasol y granos, además de derivados, entre otros aceites, por 1.200 millones de dólares anuales, el mejor perfil de las exportaciones bolivianas no tradicionales.

Ultimamente yerro en estado primario y Clinker, insumo principal para la fabricación de cemento que produce la industria local Itacamba, en las cercanías de este complejo portuario.

Se trata, desde el ámbito público, de una nueva línea de la política exterior y el comercio exterior bolivianos que, sin dejar de reivindicar una salida propia al mar Pacífico, de la que fue privado en 1879, cuando Chile invadió su entonces puerto de Antofagasta, y adicionó a su soberanía territorial 400 km lineales de litoral y 120.000 km2 de territorios hasta ese año pertenecientes a Bolivia, amplía el espectro del comercio internacional del país andino amazónico.

El mandatario boliviano que viene de recibir 13.000 toneladas de carga boliviana ultramarina en el puerto peruano de Ilo y perfilar otras 20.000 más, y que baraja, junto a Perú y Brasil el mayor proyecto comercial sudamericano de la historia, el Tren Bioceánico Central, cuyos durmientes orillan este complejo portuario, tributó su homenaje «al sector privado boliviano tan visionario» que supo «cómo acceder a los mercados internacionales» por la Hidrovía.

En la testera de un acto organizado por la Autoridad Marítima, Fluvial y Lacustre, del Ministerio de la Defensa, le escuchaban Jorge Arias, presidente de la Cámara de Industrias, Servicios, Comercio y Turismo (CAINCO), uno de los más potentes referentes de Santa Cruz, la región que más fuerte impacta el Producto Interior Bruto boliviano de 38.000 millones de dólares, y los representantes del complejo portuario concernido, Joaquín Aguirre, del puerto de nombre homónimo, Juan Valdivia, de Puerto Gravetal y Bismark Rosales, de Puerto Jenneffer.

Desde este momento «histórico», según Morales y Arias, los puertos bolivianos en el Canal Tamego, cabecera de la Hidrovía Paraguay Paraná, tendrán «nombre y apellido», es decir gozarán de homologación internacional y operarán, en su nuevo estadio de desarrollo, como tales.

Emplazada sobre 7 zonas fisiográficas, entre ellas los mineralógicos Andes (oeste) y el Precámbrico (oriente), Bolivia mueve anualmente 3,8 millones de toneladas de carga ultramarina por los puertos chilenos de Arica y Antofagasta y, 1,8 millones más por los puertos en la Hidrovía Paraná Paraguay, de 3.000 km que desembocan en el mar Atlántico.

«Saludo la inversión, el trabajo y el esfuerzo de los privados», resaltó Morales que en medio de los aplausos y beneplácito del potente empresariado agropecuario de Santa Cruz, en cuya jurisdicción territorial de halla de complejo portuario privado de mención con capacidad instalada para mover, en este mismo instante 5 millones de toneladas de carga ultramarina, anunció el desarrollo, desde el Estado, de Puerto Bush, también en el área de influencia del Canal Tamengo.

«La próxima será puerto Bush y también quisiéramos sus propuestas» para impulsarlo, enfatizó el mandatario que más tarde dijo tener listo un cheque de 250 millones de dólares para concretar el proyecto, caro anhelo de los empresarios de esta región tropical ubérrima oriental.

La aún mediterránea Bolivia explora el puerto de peruano de Ilo como alternativa al chileno de Arica que ha erizado de trabas el camino a los exportadores e importadores bolivianos, además de colapsar, pese al régimen especial que concede a la carga boliviana del Tratado de 1904, que selló el encierro geográfico del país andino amazónico y concedió a Chile el monopolio de la carga boliviana, a manera de dictadura.

«Saludo las palabras del Presidente de CAINCO (Arias) cuando decía que estos puertos son soberanos», reseñó Morales.

El concepto pareció impactar de lleno en la consciencia geopolítica del mandatario indígena.

Un exultante Arias, agradeció a Morales, y dijo que el apuntalamiento de esta triada de puertos desde el Estado vivifica el músculo económico del país y dignifica su espíritu y comercio de ultramar.

«Quiero agradecer al presidente Evo Morales y sus colaboradores porque han entendido la importancia que tiene para el país este sistema portuario que de alguna manera nos saca del enclaustramiento», sostuvo.

Dada la condición que adquirieron los puertos Gravetal, Jennefer y Aguirre, la aspiración de los privados es, en lustro, multiplicar por 10 el volumen de transporte de la producción que genera Bolivia desde el central Chapare y el oriente, norte, nordeste y sur bolivianos por la Hidrovía.

De los 37 millones de toneladas de carga brasileña, paraguaya, argentina y uruguaya que moviliza anualmente la Hidrovía, Bolivia tiene aún una participación marginal de 1,7 millones de toneladas.

La potencia insuflada por el Estado a este complejo portuario abaratará en 40% los costos de transporte, según estimaciones privadas, para los exportadores criollos.

«Este impulso representa una mejora en los aspectos de logística, infraestructura caminera, aduanera y » en lo que respecta) al SENASAG (Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria)», significó Arias.

Así, «hoy miramos a Bolivia de manera distinta, no la vemos enclaustrada, la vemos como el cuerpo soberano que nos conecta al Atlántico. Vemos una Bolivia digna que es capaz de soñar. No vemos una Bolivia sin futuro», exteriorizó.
Cc/ ABI

Comentarios
Cargando...

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Lee más